Editan y distribuyen disco en protesta al Gobierno de Venezuela. El álbum recopila 16 temas de diversos géneros —rock, pop, ska, metal, etcétera— y distintas bandas del país.
Venezuela es hoy uno de los ejemplos más comunes para hablar de lo mal que está (o puede estar) Latinoamérica en general. Y no es para menos, la crisis humanitaria que se vive en el país ha llegado a oídos de todos y, de la misma manera, todos tenemos una opinión al respeto. Pero quizá las voces menos escuchadas para los que no vivimos allá sean precisamente la de los venezolanos. De ahí que Rock contra la dictadura sea un disco relevante y pertinente.
Si bien los temas por obvias razones no suenan en la radio venezolana, según lo comenta Trackredors.mx, El Pais comenta que se pueden escuchar gracias a la emisora de radio por internet (y luego disquera) Humano Derecho. En su sitio web puede escucharse libremente cada canción y el disco completo se puede descargar por tan solo un dólar (escuchar el disco aquí).
Los artistas y bandas que integran Rock contra la dictadura volumen I son Emigdio + Superpower, Los Delorean, Colibrí, BioShaft, Cadáveres Podridos, Doctor No, Los J, Pez Volador, Agente Extraño, Sibelius, Holy Hands, Ministerio de la Suprema Infelicidad, Le Cinema, Doña Maldad, Zombies No y Cardiel.
México no se queda atrás
Las protestas de músicos y artistas —junto con el resto de la población civil— contra el grupo en el poder no son ajenas en nuestro país tampoco. Algunos sostendrán que “no estamos como en Venezuela” pero lamentablemente aquí el atropello a los derechos humanos ha sido señalado de mil y un formas, siendo la música una de tantas. Sin ir más lejos, Botellita de Jerez, quién recién presentó la versión en vynil de su disco #No Pinches Mames, reúne un conjunto de temas en protesta directa contra las acciones de los gobiernos recientes. Además de su ya conocida y establecida tendencia cómico social musical. De estos temas de protesta figura en especial #43, que —con un toque que recuerda al Fink Floyd de The Wall— proyecta un sentir comunitario, de pocas palabras pero mucho coraje (por no decir otra expresión más apropiada), sobre la tragedia de Ayotzinapa, y otras tantas que no se cuentan… pero que cuentan mucho. (Pueden escuchar la canción aquí).
